Por las razones que sean, bien por la orientación norte de tu casa o bien porque has visto cómo algunas de tus plantas más bonitas han sucumbido ante los rayos del sol, te has decantado por cultivar plantas que no necesiten mucha luz.
Si es así, te interesará el siguiente artículo donde te proponemos 12 plantas que, no solo no necesitan mucha luz, si no que son fáciles de cuidar y muy decorativas.
¡Comenzamos!
12 Sansevieria
Esta planta que puede crecer tanto en interior como en exterior, tolera el sol. Aunque si se mantuviera en zonas poco luminosas se adaptaría maravillosamente. Y lo haría por muchos años, ya que la sansevieria es famosa por su longevidad.
Sus hojas planas y robustas son sus elementos más reconocibles, creciendo en forma de roseta. De color verde oscuro, presentan vetas y líneas amarillas que la dotan de una gran belleza. Por su apariencia, es una de las plantas más queridas en los ambientes de estilo moderno.
11 Espatifilo
Es unas de las plantas más comunes y asombrosas que encontramos de interior. Su capacidad purificadora del aire es solo una de las razones por las que es tan apreciada. A esta propiedad habría que sumarle su extraordinaria facultad para desarrollarse en espacios con poca luz. Ahora bien, si quieres que crezca luciendo sus preciosas flores blancas, has de proporcionarle algo de luminosidad, pero siempre lejos de la ventana, pues el sol directo quema sus hojas.
No es necesario regarla en exceso y, a ser posible, hazlo con agua libre de cal.
10 Cinta
Junto al espatifilo y, en la línea de plantas purificadoras, nos encontramos con las cintas. Es una planta muy fácil de cuidar puesto que se adapta muy bien a cualquier espacio y condición. Requieren de humedad, por lo que un buen lugar para colocarlas sería el baño. En cuanto al riego, frecuente en verano, de dos a tres veces por semana será suficiente.
Para resaltar su aspecto colgante, te recomendamos situarlas en lugares altos (estanterías, baldas…) de los que puedan dejarse caer sus largas y luminosas hojas.
La cinta puede tolerar la luz, pero no la incidencia directa del sol, puesto que sus hojas podrían quemarse. Es, por tanto, una planta perfecta para los lugares de semisombra o, incluso, de sombra.
9 Palmera de salón
De la familia de las palmeras, esta planta es originaria de las zonas tropicales de Centroamérica, concretamente de Guatemala y México. Por ello, es una planta que requiere buenas dosis de humedad para sobrevivir. Además de un riego asiduo, se recomienda pulverizar sus hojas, al menos, cada 3 días.
Se trata de una de las variedades más demandadas en la decoración de espacios interiores. En cuanto a luz, como planta tropical, huye de aquella demasiada intensa, podría quemarla. Lo recomendable es situarla en espacios de semisombra.
8 Helechos
Si bien en otro de nuestros artículos hablamos de las virtudes purificadoras de los helechos, hoy os contamos que estamos ante una planta ideal para aquellos espacios con poca luz. Has de poner toda tu atención en mantener sus hojas húmedas, especialmente en verano, época en la que será necesario un riego asiduo. Evitaremos a toda costa los encharcamientos, pues podría provocar la aparición de hongos en la tierra que acabarían pudriendo sus raíces.
Esta planta, originaria de los pantanos de las regiones tropicales del mundo, es muy demandada en la decoración de interiores, especialmente en macetas colgantes donde puede lucir sus frondas, las cuales pueden alcanzar entre los 50 y 250 centímetros de largo.
7 Aloe Vera
Los espacios de semisombra serán los mejores aliados para el Aloe Vera, una planta muy resistente y versátil. Es toda una superviviente ante las épocas de sequía.
La planta de Aloe Vera proviene de África. Su origen explica que esta planta realice, por sí misma, acumulaciones de agua en sus hojas. Su riego ha de realizarse en pocas cantidades. Se recomienda especialmente el agua de lluvia.
Es una compañera perfecta de dormitorio pues, el Aloe Vera tiene la capacidad de liberar oxígeno y absorber el dióxido de carbono durante la noche.
6 Filodendro
Originario de las zonas húmedas de América Central y América del Sur, el filodendro huye del sol directo.
Dados sus orígenes, necesita humedad para crecer en optimas condiciones. En este sentido, recomendamos pulverizar sus hojas 1 o 2 veces a la semana. En cuanto a su tierra, ha de estar siempre húmeda.
Sus hojas suelen ser grandes, lobuladas o hendidas, de color verde o marrón, atendiendo a la variedad de Filodrendo. Esta planta puede lucir flores cuyos colores abarcan del blanco al rojo, incluyendo el amarillo.
5 Poto
Una de las plantas más comunes y preferidas por su resistencia y su bonita apariencia. El poto lleva conquistando nuestros hogares desde siempre. Es ideal para principiantes puesto que soporta la escasez de luz y solo será necesario regarlo cuando su tierra esté seca.
Sus ramas colgantes la convierten en una planta ideal para coronar estanterías o lucir en macetas colgantes. Además, el poto es una de las plantas consideradas purificadoras de ambiente, eliminando del aire sustancias tan perjudiciales como el xileno.
4 Planta del dinero
La tradición cuenta que, si conseguías que la planta se desarrollara a través de un esqueje, tendrías la suerte de ganar mucho dinero.
No sabemos si esto es cierto, lo que sí podemos aseguraros es que esta planta crecerá sin dificultades en lugares de escasa luz. Su riego no es muy frecuente, aunque habrá que ser más constantes en los meses cálidos, cuando la regaremos entre 2 y 3 veces por semana.
3 Hierbabuena
Esta hierba aromática de fácil cultivo aderezará tus platos con sabores frescos. Se desarrolla muy bien en temperaturas de entre 14º y 20º, aunque también tolera las bajas temperaturas, sin llegar a las heladas. Requiere un riego moderado, pues el sustrato ha de permanecer siempre húmedo.
En cuanto a la luz, crece sin problemas en espacios de semisombra. Disfrutará de algunas horas de luminosidad de la misma manera que lo hará durante las horas de sombra.
2 Monstera deliciosa
También conocida como Costilla de Adán por la forma de sus hojas, el hábitat natural de esta llamativa planta es la frondosa selva, donde apenas penetra la luz. Es por ello que la Monstera puede sobrevivir en espacios poco iluminados. Como la amplia mayoría de plantas mencionadas en esta lista, le gusta la humedad, pero debemos evitar los encharcamientos.
Su popularidad ha ido creciendo con los años y es debido, por una parte, a su apariencia exótica y, por otra, a lo fácil que resulta cuidar de ella.
1 Calathea
Llegamos al número 1 de nuestra lista de la mano de la Calathea, considerada una de las plantas de interior más bellas que existen. Podemos encontrar una amplia variedad de especies de Calathea, en el que el diseño de sus hojas no dejará de sorprendernos.
Ni necesita el sol ni lo quiere. Esta planta originaria de la húmeda selva tropical prefiere la semisombra pues, en su hábitat natural, únicamente recibe la luz que se filtra a través de las hojas de los árboles de mayor tamaño.
Uno de sus cuidados más importantes es la humedad. Su sustrato ha de permanecer ligeramente húmedo durante todo el año para que crezca en óptimas condiciones.